martes, 31 de agosto de 2010

TIBURCIO BERISTAIN BERRIOZABAL



En cierto modo me siento muy satisfecho, hinchado de satisfacción diría yo (humm..vamos a llamarlo así), cuando sé que, el portero que he encontrado en esta ocasión, a la inmensa mayoría ni os sonara, yo desde luego tengo que reconocer que pese a mi extensa cultura porteril desarrollada a partir de este humilde blog, no le conocía en absoluto. Pero, me gusta saber cosas que otros no saben y poder enseñarlas luego, así que, después de un arduo trabajo de investigación... articulo aquí, post allá, reseña acuyá,  puedo presentar, y presento a otro guardameta de leyenda. Aunque carente (casi) de fotografías de la época (de la suya por lo menos), he conseguido dos, una… la de la portada, sacada de la página de la Real Sociedad y… otra, que estoy convencido que aunque la encontré en una reseña sobre el, no es suya, pero me sirve para ilustrar el articulo y no voy a desperdiciar la ocasión. Además creo que tiene un cierto parecido con el personaje que nos visita hoy.

Tiburcio Beristaín Berriozábal, nació en Elgoibar (Gipuzkoa) el 6 de diciembre de 1904.

Junto con José Araquistaín Arrieta y José Luis González (tienen su aparte en el blog), son los tres los cancerberos de Elgoibar que ha tenido la Real Sociedad, de un total de diecisiete jugadores nacidos en esta villa.

Pongámonos a suponer que empezó jugando en su pueblo natal, para recalar por arte de birlibirloque (no dispongo de más datos) en Vitoria para jugar en el Deportivo Alavés donde fue fichado por Amadeo García Salazar (Medico que tuvo un papel muy relevante como entrenador y dirigente del Alavés) que fue el principal impulsor del Deportivo Alavés en los años veinte, fichando al mencionado Tiburcio a Ciriaco Errasti y a Jacinto Quincoces entre otros, que le valieron el apelativo de “El glorioso”. Esta plantilla logro el ascenso a Primera División.
Quizá a partir de esta exitosa campaña se fijo en el la Real Sociedad y le ficho, debutando en competición el 27 de septiembre de 1931, en un encuentro contra el Zaragoza. Permanecería en el equipo “txuri-urdin” hasta la temporada de 1934/35 . También fue internacional con la Selección Española en una ocasión


Hemos hablado de porteros-carniceros, de porteros-remeros, de porteros ciclistas, de porteros-pelotaris, pero de lo que no hemos hablado aun (y eso que yo he conocido alguno de mi época, que también se dedicaba a la danza e incluso al ballet, lo que le concedía una soltura y elegancia en el terreno de juego fuera de lo normal), es de porteros bailarines. Tiburcio también fue “dantzari” (bailarín en euskera) en su tierra natal, no fue un problema para el (más bien una ventaja) compaginar el “Aurresku” (danza vasca) con el futbol, pero lamentablemente no puedo daros más datos. Pero por lo menos he podido dejaros constancia de él. Posiblemente algún amigo o familiar (suele pasarme a menudo) me escriba y me dé más datos, a lo que yo estaré muy agradecido.

EQUIPOS
  • Deportivo Alavés, 1930/31
  • Real sociedad, 1931/35   
Fuentes: www.eldiariovasco.com, www.bdfutbol.com, www.wikipedia.org, www.elenganche.com, www.dantzan.com y www.realsociedad.com
Fotos: www.realsociedad.com y www.dantzan.com

martes, 24 de agosto de 2010

AITOR IRUARRIZAGA AMARIKA


Estoy descongestionando a esos porteros a los que he ido dejando atrás, hasta encontrar más información sobre ellos. No por ello son menos importantes, ya que alguno lo ha sido. ¡Y mucho!
Simplemente como ya los tenia seguro, he preferido, seguir ahondando y recopilando información acerca de otros, de los que en principio no tenía constancia. Claro, que este no es caso del guardameta que os presento hoy, ya que es de sobra conocido, al menos dentro de la familia rojiblanca del Athletic Club. Es un caso curioso ya que a su hermano también cancerbero como él, ya lo presente hace tiempo en esta bitácora. No es muy habitual (aunque se da) que más de un miembro de la misma familia sea también portero. Los que lo son, conocedores de las dificultades del puesto tratan de inculcarle otra demarcación que sea menos comprometida en el terreno de juego. Aunque no siempre se consigue. La portería tiene un veneno especial y no existe más antídoto que el de la edad. Que a veces tampoco funciona. Todos conocemos algún caso. ¿Verdad?

Aitor Irauarrizaga Amarika, conocido como Aitor Iru, nació en Bilbao el 29 de julio de 1968.

Se formo en las categorías inferiores del Athletic Club, pero no fue más allá del filial. El salto de calidad, lo da, cuando ficha por la SD Compostela en la temporada 1993/94. Una vez en el conjunto gallego se hace con la titularidad y debuta en Primera División al año siguiente, en la que juega 37 partidos. En la temporada posterior ficharía por el CP Mérida, pero aquí no disputaría ni un minuto de la campaña.

Después de todo esto en el verano de 1996 se marcha al Almería, donde recobraría la tan ansiada titularidad, a pesar de todo el equipo descendería a Segunda División B. Acompaña a los andaluces por el triste peregrinar de la división de bronce durante un año antes de volver a Segunda de la mano de la SD Éibar. Iru seria de nuevo titular en la "escuadra armera" en su primera campaña, para pasar a la banqueta en la temporada 1999/00. Sin embargo continúo en el plantel hasta 2002, cuando ficha por el Amurrio. En el equipo vasco colgó los guantes en 2004.
Después desempeño otro trabajo como peón forestal y participo como concursante en un reality show de EITB (tv vasca), concretamente en ETB 2, llamado "El conquistador del fin del mundo".


Posteriormente trabajo con la Fundación Athletic entrenando porteros en distintas localidades, también entreno guardametas en Tercera División, volvió al Athletic para hacerse cargo del entrenamiento de porteros de las categorías inferiores y actualmente forma parte del staff técnico de Lezama.
EQUIPOS
  • Athletic Club B, 1992/93
  • SD Compostela, 1993/95
  • Merida, 1995/96
  • Almeria, 1996/98
  • Eibar, 1998/2002


jueves, 5 de agosto de 2010

EDGARDO MARIO MADINABEYTIA BASSI



En uno de mis viajes a Madrid, descubrí en una librería un ejemplar de la Historia del Atlético de Madrid. Teniendo en cuenta que siento una extraña atracción por las librerías, otra afición aun más extraña por los porteros y otra por gastar (afortunadamente estaban de rebajas). Así que me hice con él, con el propósito de mejorar la información que poseo de los porteros vascos del equipo colchonero. No obstante el Atlético se formo con jugadores procedentes del Athletic, y curiosamente lo que yo no sabía es que en sus inicios se llamo Athletic (con hache) de Madrid. ¡Curioso!
Lo cierto es que he elegido una afición bastante mala, la de coleccionar porteros vascos, ya que es imposible acabarla. A los que ya están editados en el blog y los que tengo por editar que son la misma cantidad que los ya expuestos, hay que añadir los que van apareciendo por el camino. Como este que he encontrado en el libro antes mencionado. Me parece tan curioso que no he podido resistirme a incluirlo antes que otros que tengo en lista. A alguno el nombre si le sonara, pero, lo que llama la atención es su historia, cuando menos curiosa.
Lo dicho, mala afición la mía, no voy a tener vidas suficientes para acabar la colección ya que además hay otros porteros que poco a poco cumplen años y lo van dejando. No desesperéis también tendrán cabida en esta bitácora. Pero volvamos al portero que nos interesa hoy, curiosamente argentino.

Edgardo Mario Madinabeytia Bassi, nació en San Miguel, Buenos Aires, (Argentina) el 28 de agosto de 1932, con nacionalidad española, concretamente vasca, ya que era hijo de emigrantes vascos. Es por ello que le apodaban “el vasco”, también “la araña guacha”
Ya desde pequeño saltaba los obstáculos como un gato y pronto le asignaron en el equipo la posición de “arquero”. A los quince años empezó a jugar en las categorías inferiores de Huracán y con ellos debuto en la Primera División argentina. Madinabeytia tenía apenas veinte años y llamaba la atención a todos los que le veían jugar jugar por sus habilidades felinas, en especial de los ojeadores europeos que proliferaban por entonces por tierras sudamericanas.
Dos años más tarde una buena oferta encima de la mesa y su predisposición a cruzar el charco para jugar con el Atlético de Madrid, hizo que no tardara ni cinco minutos en hacer la maleta.

Un equipo el del Atlético histórico con Calleja, Griffa, Rivilla, Jones, Adelardo, Mendoza, Joaquín Peiro y Enriquito Collar. Ese equipo tenía un cañón delante y una muralla detrás. Además su origen vasco evito que ocupara plaza de extranjero.
Edgardo era agil y se movía entre los tres palos con gran familiaridad, dicharachero, fuerte, sabia ordenar a sus defensas, vivía el futbol desde dentro. Inspirado era el desaliento de los delanteros rivales. Una perfecta araña con sabor y acento gaucho.
Por la consecución del primer título europeo en la entidad colchonera, la directiva atlética tiro la casa por la ventana y otorgo a los campeones con la nada despreciable cantidad para la época de quince mil duros.
Después del Atlético, fue fichado por el Real Murcia, donde estuvo un par de años. Ya con treinta y cinco años regreso a su país y allí colgó los guantes en 1969.
Siempre que recordaba su etapa colchonera decía: “La buena vida se paró en Madrid”. A pesar de haber sido una leyenda del futbol y uno de sus mejores guardametas, su vida tras el deporte no fue fácil. Los problemas económicos marcaron sus últimos años.
Madinabeytia falleció en 2002. Los viejos atléticos del Metropolitano jamás le olvidaran tras nueve temporadas en el equipo rojiblanco.
EQUIPOS
  • Club Atlético Huracán (Argentina), 1950/58
  • Atlético de Madrid (España), 1958/67
  • Real Murcia (España), 1967/69
PALMARES
  • Liga Española (1)(1965/66) Atlético de Madrid
  • Copa del Rey (3)(1960,1961 y 1965) Atlético de Madrid
  • Recopa de Europa (1)(1961/62) Atlético de Madrid
Fuentes y fotos: http://estadium.ya.com/atmpasion/leyendas/madinabeytia.htm, www.wikipedia.com y el libro Historia del Atlético de Madrid.