Voy a tratar de reparar lo que yo creo que es un error histórico. Por una parte este guardameta posiblemente haya pasado desapercibido en la historia de las porterías vascas por dos razones: una la coincidencia de apellidos y otra que uno sucediese al otro en el cargo, lo que se encargó de solapar ambos personajes.
A través de la historia solo uno de ellos ha pasado con bastante notoriedad a la posteridad y en cambio el otro, se ha disuelto como un azucarillo en la injusticia de un claro olvido. A no ser por un lector del blog con que se inicio este libro, yo habría seguido al igual que la inmensa mayoría, en la más absoluta ignorancia de su existencia. Este lector no es otro que su nieto y ha sido capaz de sacarme de la penumbra en la que me encontraba.
A partir de aquí he puesto a trabajar toda la maquinaria a la que han sido capaces mis neuronas, pero desgraciadamente con escasos resultados. Pese a haber jugado en el Athletic Club, en su pagina web no dan noticias de él, como ya digo las circunstancias que he comentado en las líneas anteriores sean parte de la culpa.
He podido constatar otros porteros olvidados que pese a que si que debutaron en algún momento con el equipo rojiblanco, tampoco aparecen. Parece ser que si no has debutado en competición oficial no te has ganado el derecho a aparecer entre las fichas del club, aunque estuvieses convocado y te sentaras en el banquillo. Pero ya os digo que también he encontrado algún pequeño error a este respecto. No digo que no sea disculpable, pero me parece algo inusual. Quizá la cercanía de la Guerra Civil (en este caso) y la posible pérdida de fichas y archivos en aquella época tan convulsa hayan contribuido a que se den estas circunstancias y contradicciones.
Son muy pocas las referencias que he encontrado acerca de él y las únicas fotografías carecen de la resolución necesaria para que su rostro salga del anonimato. Lo que sí que cierto, es que jugó en el Athletic Club, como así me corrobora, gracias a la memoria de su padre, su nieto Ignacio Izpizua.
Hubo dos Ispizua en el Athletic y ambos jugaron con el gran guardameta Blasco. José Luis Ispizua, el más conocido, ya que hay cantidad de fotografías y testimonios sobe él y el otro, el gran anónimo, Germán Ispizua.
GERMÁN ISPIZUA URIBE, nació en Bilbao (Bizkaia), el 9 de febrero de1906.
Germán, al igual que José Luis, provenía del Acero de Olabeaga, otra coincidencia más que pudo provocar el error, las fotografías de aquella época eran más bien escasas y creo que se ha llegado a la conclusión de que eran la misma persona. También Blasco jugó en la misma época en el Acero. Casi parece un caso de un folletín detectivesco.
El caso es que, Germán Ispizua, fue el que viajo con la expedición del Athletic Club por una gira por Austria Y Hungría con Mr Pentland de entrenador en 1926. Germán coincidió con los últimos años como rojiblanco de Vidal y los primeros de un jovencito Blasco.
Según su nieto Ignacio, durante muchos años, el salón de su casa lo presidia una fotografía de aquel encuentro con una parada de su abuelo. La historia hasta ahora nos cuenta que fue el otro Ispizua el que jugó muchos de esos partidos, claro que la historia a veces también puede estar equivocada, solo depende de quien la cuente.
Germán Ispizua, durante dos temporadas se desempeño en el Athletic, pero con la llegada de los hijos fue dejando de jugar. Eso no le impidió ser directivo del Athletic y granjearse la amistad de otro grande, Iribar. Al ser directivo en los años sesenta y el Athletic empezase a viajar por Europa, Germán les acompañaba como responsable del club. También se ganó la amistad de otros jugadores, como es el caso de Gainza, del que se hizo intimo; Su aita le cuenta a Ignacio como Gainza y otros jugadores, una vez retirados, venían en tren hasta el Arenal bilbaíno y quedaban con Germán, cogían un taxi y se desplazaban a San Mames para presenciar el partido correspondiente.
La historia es a veces cíclica, ya que a pesar de que al nieto de Germán no le gusta demasiado el fútbol, su hijo le ha salido portero y juega en el Athletic. Su aita que también acude a ver sus partidos a Lezama, se sitúa detrás de la portería y suele comentar suspirando con añoranza: “Si mi aita viera esto…”
Lo mismo que me está pasando a mí le ocurrió al hijo de Gemán, al solaparse los apellidos y haber tan pocas fotos de su aita (prácticamente ninguna), cuando en el colegio decía que su aita había jugado en Athletic Club, casi nadie le creía, ya que el que aparecía siempre en las fotos era el otro Ispizua, José Luis.
Su nieto ha sido capaz de recopilar alguna foto de su viejo carnet de jugador del Athletic y amablemente me las ha mandado para que pudiese poner cara a este capitulo.
En fin espero haber contribuido a dar a conocer al otro Ispizua, aunque no os pueda aportar (desgraciadamente) grandes cosas.
Germán Ispizua falleció en Bilbao, el 11 de mayo de 1982.